El mayor obstáculo que presenta el virus de la inmunodeficiencia humana VIH es su capacidad de adaptarse y volverse más fuerte. Esto hace que el sistema inmunitario se debilite y es la oportunidad perfecta para que enfermedades oportunistas ataquen un cuerpo infectado e incapaz de protegerse. Esta capacidad de mutar es lo que complica el desarrollo de una cura o vacuna para esta enfermedad.

Sin embargo las investigaciones continúan buscando nuevas oportunidades. De hecho, un nuevo estudio realizado en Rockefeller University mostró un interesante hallazgo que podría ser una ruta a la cura de esta enfermedad.

Según los investigadores, una combinación de tres anticuerpos en fármacos suprimió el virus en ratones infectados. Estos anticuerpos fueron aislados de un paciente cuya respuesta inmune al virus es muy efectiva y rara.

Para entender mejor es necesario conocer que la mayoría de personas que contraen el virus eventualmente desarrollan SIDA. Pero existe un pequeño grupo de gente, denominado los controladores élite que poseen un sistema inmune capaz de neutralizar el virus. Consiguen esto a través del desarrollo de tres anticuerpos que atacan eficazmente al virus.

El estudio utilizó fármacos compuestos por estos tres anticuerpos y lograron exitosamente neutralizar el virus en ratones infectados. Y lo más importante es que esta combinación genera una especie de complicidad donde los tres anticuerpos trabajan de manera conjunta para frenar completamente al virus.

Los anticuerpos se tratan de BG18, NC37 y BG1. Este estudio apunta hacia una nueva dirección en el camino para encontrar una cura efectiva contra el VIH.