Persona tomando la presión

Algunas investigaciones han demostrado que las personas con mayor riesgo de enfermedad cardíaca pueden reducir su riesgo hasta en un 80% al tomar 7 medidas preventivas simples.

Estas medidas no solo reducen el riesgo de enfermedad cardíaca. Quienes toman estos 7 pasos reducen el riesgo de accidente cerebrovascular a la mitad, reducen el riesgo de cáncer en 1/3 y les brindan la mejor posibilidad de evitar la demencia.

Se calcula que el 78% de los adultos de Estados Unidos, con edades entre los 18 y los 80 años fallan en al menos uno de estos objetivos para tener un corazón sano.

Las siete medidas simples que pueden salvar vidas son:

  1. Mantenerse físicamente activo.
  2. Tener una dieta saludable.
  3. No fumar.
  4. Mantener un peso saludable.
  5. Mantener los números de presión arterial en un rango saludable.
  6. Mantener números saludables de colesterol.
  7. Mantener números saludables de azúcar en la sangre.

Se pueden evitar las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares. Si todos los que tienen margen de mejora hicieran esas mejoras y cumplieran con todos los puntos de referencia, vivirían 1.3 años más, en promedio, reduciendo los ataques cardíacos en un 63% y los accidentes cerebrovasculares en un 31% en los próximos 30 años, estiman los investigadores.

Aunque las personas lo intentaran pero no cumplieran todos los objetivos, están haciendo un gran cambio. Eso todavía tendría un impacto real en la enfermedad cardiovascular, la principal causa de muerte entre hombres y mujeres de EE. UU., según un estudio de la Asociación Americana del Corazón, la Asociación Americana de la Diabete sy la Asociación Americana del Cáncer. El estudio, publicado en la edición anticipada en línea de Circulation, se basa en estudios nacionales de salud realizados entre 1998 y 2004.

Otra opción son los medicamentos. Si todos dependieran de medicamentos recetados, podría ser una pestaña considerable. Pero los cambios en el estilo de vida, como una dieta más saludable y un estilo de vida más activo, son una gran parte de la salud del corazón.

Además de estas recomendaciones, conviene evitar ciertos hábitos. Hay que controlar la cantidad de alcohol que se ingiere. En medidas moderadas, puede incluso tener beneficios para el corazón, pero al pasar de la cantidad recomendada aumenta los niveles de grasa en la sangre y también causa un alza en la presión.

No solo se debe evitar el cigarrillo, sino también estar cerca de alguien mientras está fumando. El humo inhalado también daña el corazón.

No hay que hacer de menos el malestar ya que puede ser síntoma de alguna enfermedad. Cualquier malestar puede ser un signo de alerta y hay que tomarlo con la seriedad necesaria. Se debe consultar a un doctor para encontrar la causa. Estos síntomas podrían ser dolor en el pecho; dificultad al respirar; dolor en los hombros, espalda, brazos, mandíbula o cuello; o cansancio inusual.

Las visitas rutinarias al médico son necesarias, no deben ser postergadas. Aunque no haya dolor o alguna señal de alarma, es necesario realizar controles regulares. Este hábito nos ayuda a prevenir el avance silencioso de las enfermedades, a detectar a tiempo los problemas y tratarlos adecuadamente.

Fuente: WebMD