¿Los helados y bebidas frías te ocasionan molestias en los dientes? ¿O tal vez sientes un pequeño sacudón mientras te cepillas los dientes o utilizas tu enjuague favorito? Si sientes estas molestias constantes, podrías sufrir de sensibilidad en los dientes. Aquí te enseñamos las causas principales de esta condición y cómo aliviarla.

De dónde podría venir

Existen algunos hábitos que podrían desencadenar la sensibilidad dental. Aunque no lo creas, la higiene excesiva podría ser uno de los motivos principales. Muchos de los productos bucales, como los blanqueadores y enjuagues, tienen alcohol y otros químicos que hacen sensibles a los dientes. Si a esto le sumas cepillos muy duros o mucha fuerza para lavarse los dientes, los resultados no serán los mejores. Busca productos sin alcohol, cerdas suaves y aprende a lavar tus dientes sin lastimarlos.

Algunas condiciones como enfermedades de encías o demasiada placa tampoco ayudan. Recuerda mantener una buena higiene y visitar al dentista regularmente para que el esmalte de tus dientes esté en perfecto estado y pueda protegerlos de la sensibilidad. El mismo efecto ocurre con las caries o grietas que se pueden formar.

Y por último, evita los alimentos ácidos. Cuando los nervios están expuestos, los alimentos ácidos como la salsa de tomate, el limón, kiwi, y otros causar dolor. Además de de aliviar la sensibilidad, evitar esta categoría de alimentos puede aliviarte una alta gama de malestares dentales.

Cómo aliviarla

No te alarmes, la sensibilidad dental es tratable. Podrías encontrar alivio utilizando un cepillo de cerdas suaves y aprendiendo a cepillar con más delicadeza. También es importante utilizar los productos destinados a esta condición como pasta dental para dientes sensibles o productos sin alcohol. Evita los tratamientos blanqueadores, salvo que tu dentista considere que sea una opción segura.

Sobre todo es importante visitar al dentista para una evaluación. Dentro de poco, notarás una diferencia.