La palabra “infarto” es ampliamente conocida y asociada inmediatamente con un ataque al corazón. Además, se tiene conocimiento, ya sea por experiencia personal o de un allegado, que de no ser tratado con suma urgencia, un infarto de miocardio es letal. ¿Qué pensarías si la modificación completa de la dieta, por una vegana, fuera la solución definitiva para este grave padecimiento?

Según las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 17.5 millones de personas mueren al año debido a un infarto de miocardio y al contrario de lo que se piensa, más de 3 de cada 4 de estas muertes se registraron en países de bajos y medianos ingresos, y afectaron por igual a ambos sexos.

La buena noticia es que el 80% de los infartos de miocardio prematuros son prevenibles. La dieta sana, la actividad física regular y el abandono del consumo de tabaco son fundamentales. Así como, controlar factores de riesgo asociados como la hipertensión, niveles elevados de colesterol y diabetes.

¿Qué es un infarto de miocardio?

El corazón humano es el músculo más fuerte del cuerpo y apesar de ser un órgano pequeño, del tamaño de un puño, con cada latido, bombea sangre que lleva oxígeno y nutrientes a todas las partes del cuerpo, a una velocidad promedio de 70 latidos por minuto.

Para su funcionamiento, a su vez, el corazón obtiene oxígeno y nutrientes a través de unos vasos sanguíneos denominados arterias coronarias. Si se llega a interrumpir dicho flujo hacia el corazón, la falta de oxígeno y nutrientes puede causar lesiones permanentes en ese órgano vital. Si el bloqueo es súbito recibe el nombre de infarto de miocardio.

Los infartos de miocardio se deben principalmente a una obstrucción ocasionada por la formación de depósitos de grasas en las paredes internas de los vasos que aportan sangre al corazón, con lo cual los vasos se vuelven más estrechos y menos flexibles, haciendo más probable la formación de coágulos y una obstrucción completa.

Dieta vegana y el infarto de miocardio

El Dr. Sanjay Gupta, corresponsal médico principal para CNN, condujo una investigación por más de un año, que busca probar los beneficios de una dieta vegana tanto en pacientes que sobrevivieron a un infarto, así como quienes presentan factores de riesgo inminentes para desarrollar una enfermedad coronaria.

Una dieta vegana, hace referencia a una alimentación que carece por completo de carnes (de cualquier tipo), lácteos, huevos y aceite. Se basa en el consumo de granos enteros, cereales, pan, pasta, vegetales rojos, verdes y amarillos y fruta. Los vegetales que particularmente se recomiendan son: col, col rizada, acelga, nabos, remolacha, coles de brusela, brócoli, coliflor, cilantro, perejil, espinaca, arúgula y espárragos. El mantra dice: “no comas nada que tenga madre o cara”.

El Dr. Caldwell Esselstyn, médico de la Cleveland Clinic y autor de “Prevenir y revertir la enfermedad cardiaca”, menciona que una dieta vegana te convierte en un individuo “a prueba de infartos”. En el seguimiento que ha realizado a múltiples pacientes, durante 20 años, observa que los pacientes que se adhieren a su régimen, no solo previenen la aparición de un infarto, sino que aquellos que tenían un bloqueo coronario previo, revierten el mismo.

“Nos metimos en este problema comiendo, podemos salir del mismo comiendo” dice el Dr. Terry Mason, jefe médico del Hospital del Condado de Cook y adepto al régimen dietario propuesto por el Dr. Esselstyn, quien afirma que los infartos de miocardio son completamente prevenibles, sin importar los antecedentes familiares, únicamente comiendo bien.

Durante su investigación, Esselstyn encontró que poblaciones del África Central, Nueva Guinea y los Indios Tarahumara en México, no tienen riesgo alguno de padecer un infarto de miocardio. Lo que los diferencia de la población general, es su dieta.

En la actualidad, el problema principal es que la mayoría de individuos, han desarrollado hábitos que giran en torno a una vida sedentaria, acompañada de dietas hipercalóricas, ricas en proteínas y grasas, generando un gran problema mundial de salud.

A pesar de que los hallazgos mencionados en los pacientes que siguen la dieta Esselstyn son alentadores, al momento han sido comprobados solo en pequeños grupos de personas. Se necesitan estudios grandes y a largo plazo, que validen por completo la evolución favorable de pacientes en riesgo de padecer o que padecieron un infarto de miocardio. Aunque cabe mencionar, que muchas personalidades como Bill Clinton la siguen y recomiendan.

Expertos en nutrición que recomiendan una dieta vegana, como el Dr. Dean Ornish del Instituto de Investigación de Medicina Preventiva, afirma que los pacientes se revitalizan tras poco tiempo de iniciar el régimen alimentario, cambiando su motivación de “miedo a morir por dicha de vivir”.

“Es posible prevenir que cualquier persona sufra de un infarto de miocardio, a través de la educación, conocimiento e información. Ahora la pregunta real es, ¿la gente está dispuesta a seguir estas recomendaciones?” finaliza el Dr. Esselstyn.

Fuente: CNNHealth