Todo parece indicar que sí. Así que continúa con tu café de la mañana y de la tarde con tranquilidad, pues una nueva investigación publicada en la Sociedad Europea de Cardiología sugiere que tomar hasta 4 tazas de café diarias es parte de una dieta saludable y podría reducir el 64% de probabilidades de una muerte prematura (en relación a los no bebedores de café).
La reducción del riesgo es más notoria en las personas mayores a 45, así que si eres menor y no bebes café, no estás tarde para empezar y gozar de estos beneficios a largo plazo. Lo interesante de esta investigación es que se apoya a otro estudio que observó que los bebedores de café (cafeinado o descafeinado) parecen vivir más tiempo.
Entre los posibles beneficios del café también se encuentra la reducción de riesgo de enfermedades como la diabetes tipo 2, enfermedades hepáticas, cáncer colorrectal, Alzheimer y cáncer de piel. Esto podría ser gracias a que el café es rico en antioxidantes y otros compuestos que mejoran la sensibilidad a la insulina, la función hepática y la inflamación crónica reducida. Así lo aseguran estudios recientes sobre consumo de café y longevidad.
Si bien suena ideal, algunas personas deben beberlo con precauciones. Las mujeres embarazadas por lo general son recomendadas de evitar el consumo de café con cafeína, al igual que las personas con condiciones cardíacas. En ambos casos, el café podría ser perjudicial para la salud del paciente o del feto. De todos modos, si perteneces a este grupo te recomendamos que resuelvas esta duda con tu doctor y recuerdes que café descafeinado no quiere decir sin cafeína, solamente reducido en.
Para sacarle el mejor provecho a tu taza de café, te recomendamos mezclarlo con leche descremada y baja en grasa, además de no agregar crema o azúcar. Con estos pequeños cambios ahorrarás algunas calorías y a largo plazo algunas libras.
Recuerda que si tienes problemas para conciliar el sueño, es mejor evitar el café y otras fuentes de cafeína (como el té) por la noche o cerca de la hora de acostarse.
