Algunos hábitos diarios que parecen poco importantes pueden representar una gran diferencia al momento de tener sexo. Realizar pequeños cambios en el estilo de vida pueden significar una mejora importante.
La comida chatarra llena el cuerpo con muchos carbohidratos refinados, azúcares simples y grasas saturadas y trans. Esto puede ralentizar el flujo sanguíneo y afectar el desempeño durante el sexo. Es recomendable disminuir la cantidad de fritura y consumir muchas frutas, verduras y proteínas a base de plantas, como nueces, frijoles y tofu.
Cuando los alimentos salados son una parte regular de la dieta, es más probable que tenga presión arterial alta, lo que puede disminuir el líbido. Hay que evitar en lo posible los alimentos preenvasados, que a menudo tienen mucho sodio, y observar cuánto se agrega en las comidas diarias. Se puede reemplazar la sal con hierbas y especias.
La tensión constante y la preocupación desgastan física y mentalmente. Cuando el cuerpo se inunda con hormonas de estrés durante largos periodos de tiempo, secuestra la salud y también anula el deseo de tener relaciones sexuales. Tratar de descubrir cuáles son los factores que causan estrés para pensar en mejores formas de manejarlo. También es una buena idea hacer tiempo para el alivio regular del estrés, como una caminata en un parque o una clase de yoga .
La ciencia respalda que el juego previo es muy importante y por ello no debe dejarse de lado. En una encuesta de casi 8,700 personas, tanto hombres como mujeres dijeron que el sexo duró más tiempo cuando incluyeron más tipos de estimulación de antemano. El sexo oral y la masturbación son buenas opciones.
Cuando la vida se vuelve agitada, el sexo a veces puede ser lo primero que se deja de hacer. Pero la intimidad en una relación debe ser una prioridad. Programar sexo puede sonar como algo poco divertido, pero puede ayudar a asegurarse de no posponerlo.
La falta de sueño también afecta al líbido. Un estudio encontró que las mujeres que dormían más tendían a tener más y mejor sexo.
A veces, las rutinas durante el sexo suelen volverlo aburrido. Se recomienda probar nuevas posiciones o tener relaciones sexuales en un lugar o en un momento poco frecuente. También se puede intentar agregar nuevas alternativas como masajes o juguetes sexuales.
Una de las reglas más importantes a la hora del sexo es la comunicación. Es necesario hablar sobre las que cosas que molestan o sobre nuevas ideas para volver la experiencia más divertida. Aunque no será un tarea fácil, hay que enmarcar la conversación alrededor de sentimientos y reacciones propios, no los de la pareja. Un consejo sencillo es comenzar todas las oraciones por “yo” en lugar de “tú”.
Un vaso de vino o una cerveza puede ayudar a relajarse, pero una borrachera de alcohol puede tener el efecto contrario. Los hombres en particular pueden tener problemas de rendimiento cuando tienen demasiado alcohol en su sistema. La recomendación es sencilla, hay que beber con moderación, no más de una bebida al día para mujeres y dos para hombres.
