La  obesidad es un creciente problema de salud pública que no solo afecta a los adultos. Desde 1975, la obesidad infantil ha aumentado 10 veces en todo el mundo, reporta un nuevo estudio. A pesar de esto, en 200 países analizados, aún son más los niños que se encuentran desnutridos, que los presentan severo sobrepeso.

Investigadores encontraron que para el año 2016, las tasas de obesidad subieron de menos del 1% hasta alrededor del 6% en niñas y casi el 8% en niños, con porcentajes que alcanzan el 20% o más en países como los Estados Unidos, Egipto y algunas Islas Polinesias.

De acuerdo con este estudio, se necesita implementar una estrategia con 2 objetivos, mejorar la nutrición y reducir la excesiva ganancia de peso. “Las tasas de obesidad infantil y en adolescentes han aumentado significativamente en las últimas 4 décadas, en la mayoría de países del mundo” afirma James Bentham investigados de la Universidad de Kent en Inglaterra y autor del estudio.

“Mientras el Índice de Masa Corporal (IMC) en los niños y adolescentes se ha estabilizado en Europa y Estados Unidos, no es una excusa para la complacencia, ya que 1 de 5 jóvenes en Estados Unidos y 1 de 10 en Inglaterra, son obesos” dijo Bentham. El IMC es una medida de la grasa corporal, basada en la talla y el peso.

Un hecho alarmante es que, de acuerdo con Bentham, las tasas de obesidad infantil y adolescente están aumentando rápidamente en el Este, Sur y Sudeste de Asia, así como en otras regiones de bajos a medianos ingresos.

En conjunto hoy por hoy, 50 millones de niñas y 74 millones de niños son obesos, lo que los predispone para varios y severos problemas de salud a futuro, afirman los investigadores. Dichas tasas de obesidad alcanzaron el nivel más alto (por encima del 30%) en algunas Islas Polinesias como Nauru y Cook. Además, de Estados Unidos, tasas de por encima del 20% se observaron en el Caribe, tanto en Aruba como en Puerto Rico.

Adicional a los 124 millones de niños obesos, 213 millones de niños y jóvenes, de entre 5 a 19 años, tienen sobrepeso. “La tendencia muestra que sin una acción seria y dirigida para combatir la obesidad, la salud de millones de personas estaría en peligro, guiando a un inmenso costo humano y económico para las comunidades”, dijo otro autor del estudio, Leanne Riley de la Organización Mundial de la Salud.

A pesar de la creciente población con obesidad, contradictoriamente, la desnutrición continúa siendo la mayor preocupación en diversas regiones. El estudio encontró que 75 millones de niñas y 117 millones de niños están moderada o severamente por debajo de su peso. Casi dos tercios de éstos se encuentran en el Sur de Asia.

“Existe una necesidad continua para políticas que aseguren el acceso a alimentación en los países y hogares de bajos recursos, especialmente en el Sur de Asia”, dijo Majid Ezzati de la Universidad Imperial de Londres.

Ezzati además recalcó que la transición de bajo peso a sobrepeso y obesidad pueden ocurrir rápidamente, haciendo referencia a la ingesta de alimentos hipercalóricos pero pobres en nutrientes, que se consumen en países en vías de desarrollo. Los hallazgos evidencian la desconexión que existe entre el diálogo mundial con respecto al sobrepeso y obesidad y las iniciativas que se enfocan en la desnutrición, agregó.

Fuente: WebMD