Esta es una pregunta muy popular. Por muchos años varios científicos han investigado sobre los posibles riesgos del uso del teléfono celular, en especial si aumenta la probabilidad de una persona de contraer cáncer. Los resultados han sido mixtos, polémicos y algunas veces confusos.

No existe un consenso como tal, pero en términos generales podríamos afirmar que en caso de que existan riesgos para la salud ocasionados por los smartphones todavía es muy pequeño. También es difícil probar que no los existan del todo, así que parece que la pregunta seguirá abierta.

¿Por qué es tan difícil obtener resultados concretos? Hay dos factores que complican esta investigación en particular. El primero, es que el uso de los celulares sigue siendo relativamente nuevo. Por ejemplo, hoy en día en Estados Unidos el 95% de sus ciudadanos reporta el uso del aparato. Un salto enorme en relación al año 2000 cuando el número estimado era un 28%.

El segundo problema es que los tumores cerebrales ocasionados por radiación suelen tomar entre 10 y 15 años para desarrollarse. Un dato que complica el hecho de que el uso masivo de los celulares no cumple ni siquiera dos décadas, complicando así la investigación. De todas maneras, si estás pensando que ya es tiempo suficiente para ver mayor incidencia de tumores cerebrales malignos, te contamos que por el momento no se ha registrado algo similar.

También es importante recordar que los celulares no emiten suficiente radiación para mutar el ADN de una persona, como lo podría hacer una bomba nuclear o un viaje al espacio exterior. Además, los niveles de radiación y la tecnología en general ha cambiado muchísimo en los últimos años. Es decir, nuestros celulares tienen muy poco parecido con sus antecesores.

Muchos científicos, reguladores y líderes en tecnología dicen que no hay razón para preocuparse por los teléfonos celulares. Sin embargo, si sigues preocupado algunas recomendaciones que podrían servirte es usar un manos libres para hablar por teléfono en lugar de pegar el teléfono directamente a tu cara. O si no disfrutas de hacer llamadas telefónicas, la distancia entre tu mano y tu cuerpo mientras mandas mensajes puede ser suficiente.