El aborto es un tema altamente controversial. Sin embargo, es una realidad que nos atañe a todos.

Un último estudio reporta que más de 25 millones de abortos inseguros se practican cada año en todo el mundo. Lo que quiere decir que aproximadamente la mitad de los 55.6 millones de abortos anuales, se efectúan en lugares insalubres y peligrosos, según el reporte de la Organización Mundial de Salud y el Instituto Guttmacher en Nueva York.

Los autores observaron que la mayoría de interrupciones de embarazo peligrosas ocurren en África, Asia y Latinoamérica. Los datos analizados indican que en el periodo del 2010 a 2014 el 55% de interrupciones siguieron el método seguro recomendado por la OMS (aborto médico, aspiración con vacuum o dilatación con evacuación), que involucre al menos una persona entrenada.

“La mayor proporción de abortos seguros se observaron en países donde existen leyes menos restrictivas, alto desarrollo económico e infraestructura médica bien desarrollada, lo que sugiere que tanto el marco legal y el desarrollo socioeconómico de un país, juega un rol esencial en la seguridad de un aborto, más no en la tasa de ocurrencia de los mismos”, comenta la autora del reporte Dra. Bela Ganatra, científica de la OMS.

Alrededor del 31% de todos los abortos (alrededor de 17 millones), fueron clasificados como “menos seguros”. Lo que incluye a abortos realizados por una persona entrenada pero con un método anticuado como el curetaje, o con un método seguro como el misoprostol, pero sin compañía de una persona entrenada.

Por último, el 14% de abortos (8 millones), fueron clasificados como “inseguros”. Estos fueron llevados a cabo por personas sin preparación y utilizando métodos invasivos, dentro de los cuáles están la ingestión de cáusticos, introducción de cuerpos extraños o el uso de mezclas o preparados “tradicionales”.

Lastimosamente, los abortos inseguros se asocian a una tasa de mortalidad materna más elevada, a consecuencia de complicaciones del proceso y un sistema de salud pobre.

“Nuestros hallazgos hacen un llamado a asegurar el acceso a abortos seguros en toda la extensión de la ley, particularmente en regiones con nivel socioeconómico bajo, además de esfuerzos necesarios para reemplazar los métodos inseguros por los seguros” Ganatra enfatizó.

“Aumentar la disponibilidad, accesibilidad y asequibilidad de métodos anticonceptivos puede reducir la incidencia de embarazos no deseados, y por lo tanto de abortos, pero es esencial combinar la estrategia con intervenciones que aseguren el acceso a abortos seguros”, concluyó.

Hay que tomar en cuenta, que sin importar la postura que se tenga frente al aborto, una mujer que ha tomado la determinación de interrumpir un embarazo, lo hará, sin importar las condiciones, las leyes o incluso su religión. Por lo que asegurar su vida y su salud es esencial.

Fuente: WebMD