¿Crees que el exceso de trabajo afecta solo tu agenda personal y tus horas de sueño? Parece que en realidad, nos perjudica mucho más de lo que pensamos. Trabajar largas horas podría aumentar el riesgo de sufrir un trastorno de ritmo cardíaco, así lo asegura un nuevo estudio del University College de Londres.

En la investigación británica se observó que las jornadas largas están relacionadas con mayor riesgo de fibrilación auricular, que es el tipo de arritmia cardíaca más común. El problema incrementa cuando se considera que la fibrilación auricular es un factor de riesgo para sufrir de un accidente cerebrovascular y otras condiciones adversas para la salud, como la insuficiencia cardíaca y la demencia relacionada con el accidente cerebrovascular.

Los investigadores observaron a alrededor de 85.500 personas en el Reino Unido, Dinamarca, Suecia y Finlandia. Notaron que las personas que trabajaban 55 o más horas a la semana eran aproximadamente un 40% más propensas a desarrollar fibrilación auricular en los próximos 10 años que aquellas que trabajan entre 35 a 40 horas por semana.

Sin embargo, el estudio no muestra una relación directa de causa y efecto. Esto quiere decir que los resultados deben ser interpretados con precaución. Es importante no saltar a conclusiones, pero tampoco hacerse de la vista gorda con las conclusiones.

Además de las horas de trabajo, otro factor que influencia en el desarrollo de este tipo de arritmia es el estilo de vida que lleva una persona. El sobrepeso, tabaco, altos niveles de estrés y llevar una vida sedentaria también afectan de manera negativa al desarrollo de esta condición.

Este estudio seguirá en investigación para ver si los resultados fueron casualidad o la pista de algo más grande. Si te preocupa tu nivel de trabajo, recuerda mantener una vida equilibrada, monitorear tu pulso cardíaco y encontrar maneras para reducir el estrés ocasionado por las largas horas laborales.