Tal vez ya escuchaste la palabra antinutrientes. Este término ganó popularidad este año cuando una conocida revista en Estados Unidos reveló que el famoso kale o col rizada podría tener compuestos que interfieran con la producción de hormonas tiroideas.

La nota fue todo un acontecimiento, pues puso en duda que este popular vegetal sea un  súper alimento gracias a su aparente lado oscuro. De hecho, el kale (y otros vegetales crucíferos) contienen compuestos llamados glucosinolatos que podrían suprimir la capacidad de la glándula tiroides para absorber el yodo y convertirlo en hormonas esenciales para regular el metabolismo.

La buena noticia es que esta preocupación es principalmente teórica por dos motivos: el primero es que los compuestos responsables de esto por lo general se destruyen al ser cocinados y la segunda es que, incluso para los que comen mucho kale crudo, interferiría solo en las personas con trastornos de la tiroides preexistentes. La otra noticia es que dio a conocer al mundo sobre los antinutrientes.

El término antinutrientes se refiere a todo compuesto que reduce la capacidad del cuerpo para absorber o utilizar nutrientes esenciales como vitaminas y minerales. Estos incluyen alácido fítico (o fitatos), lignanos, saponinas, fitoestrógenos, oxalatos, compuestos fenólicos y otros. Por lo general se encuentran en los vegetales aunque su cantidad varía según el alimento.

¿Por qué no debes preocuparte? A pesar que pueden restringir la absorción del cuerpo o el uso de ciertos minerales y otros compuestos, no lo bloquean por completo. Tendrías que comer cantidades enormes de estos alimentos para que tengan un efecto real y perjudicial en tu metabolismo. De hecho, los has venido consumiendo por años. Los famosos glucosinolatos del kale están presentes también en el brócoli.

No te dejes asustar por el término antinutriente. Aunque no lo creas estos compuestos también tienen beneficios para la salud, como por ejemplo el ácido fítico que se encuentra en grandes cantidades en frijoles y granos enteros podría ayudar a disminuir los niveles de azúcar en sangre. Los únicos motivos para evitar estos alimentos deben ser diagnosticados por un médico en casos muy específicos como cálculos renales.