Las enfermedades del hígado no se limitan únicamente al consumo de alcohol. Algunos hábitos del día a día pueden ser igual de perjudiciales y es importante tenerlos en cuenta para llevar un estilo de vida saludable.

El azúcar no es sólo malo para tus dientes, si lo consumes en exceso también puede ser dañino para el hígado. Algunos estudios muestran que puede ser tan malo como el alcohol, pues mucho azúcar causa una acumulación grasa en el órgano y conducir a una enfermedad hepática.

La mala noticia, es que la grasa puede venir de más lugares que el exceso de azúcar. En general, una mala dieta y los kilos de más tienden a acumularse en las células del hígado y causar una enfermedad hepática que eventualmente conduce a la cirrosis. Esto es más probable si tienes sobrepeso u obesidad.

Curiosamente, algunos hábitos que parecen buenos también pueden afectar el hígado. Demasiado suplemento de vitamina A pueden causar problemas en el hígado. Es mejor consumir vitamina A directamente de plantas y verduras frescas para evitar este problema.

Lo mismo sucede con el acetaminofeno. Es normal tomar este fármaco para reducir el dolor de cabeza o un resfriado, pero es importante que la dosis sea la correcta. Asegúrate con un doctor de que todo esté en orden, quédate con esos límites y todo debería estar bien.

Un buen método de prevención es tener una dieta saludable, evitar azúcar, las gaseosas o bebidas azucaradas, medir tu consumo de grasa y por su puesto de alcohol. Tener una vida activa y hacer ejercicio es una manera también es efectivo para reducir los riesgos.