7 mitos del chuchaqui

persona con botella

¿Crees que los sabes todo acerca del chuchaqui? ¿Crees que la experiencia te ha enseñado todo? Desafortunadamente existen muchos mitos y mentiras alrededor de la resaca, así que vamos a desmentir algunos datos conocidos.

“El chuchaqui afecta a hombres y mujeres por igual”

Malas noticias para las mujeres. En términos generales, los hombres tienen más porcentaje de agua en sus cuerpos y por lo tanto el alcohol se diluye más fácil. Si un hombre y mujer beben la misma cantidad, en el cuerpo de un hombre se diluirá mientras que en el de una mujer un mayor porcentaje se acumula en el torrente sanguíneo.

“Unas pocas copas no dan resaca”

No hace falta que te tomes hasta el agua del florero para sentir los efectos del alcohol al día siguiente. Un par de bebidas pueden ocasionar dolor de cabeza y otros síntomas para algunas personas. Una manera de reducir el efecto es tomando un vaso de agua o de otra bebida sin alcohol y sin azúcar entre cada cerveza o coctel. Tu cuerpo te lo agradecerá más tarde.

“El vino no da terribles chuchaquis”

Depende de la persona, si bien es el caso de muchos, otros sufren de dolores de cabeza en reacción a algunos compuestos del vino. Si buscas una opción que no te recordará las copas del día anterior, la mejor opción son los licores claros como el vodka o la ginebra. Evita los licores de malta, como el whisky porque sus efectos suelen ser peores.

“La mejor cura es tomar pastillas antes de dormir”

Esto no es la mejor idea, primero porque los analgésicos sin receta funcionan un estimado de 4 horas (de modo que su efecto habrá terminado para cuando te despiertes) y segundo, es el doble de trabajo para tu metabolismo. Lo mejor es tomar una pastilla el momento que te despiertes y evitar que sea acetaminofén, pues combinado con el alcohol podría dañar a tu hígado.

“El alcohol te ayuda a dormir.”

Tal vez una copa pueda tener este efecto, pero más de una afectará la calidad del sueño. El alcohol afecta a los ciclos REM de descanso y nos hace despertar más pronto que de costumbre. Esto sin contar los mareos que a veces impiden dormir, o los inicios del chuchaqui que no permiten descansar cómoda y plácidamente.

“El chuchaqui se cura con una cerveza”

Tomar más alcohol por la mañana no hace más que posponer lo inevitable. ¿Por qué? Los peores síntomas los sentimos cuando los niveles de alcohol en la sangre vuelven a cero, así que una cerveza en la mañana moverá este momento al mediodía.

“El café es la cura”

La cafeína podría estrechar los vasos sanguíneos y solo empeorar la situación. Después de una noche de copas, lo mejor es tomar agua y bebidas hidratantes para reemplazar los electrolitos perdidos, especialmente si vomitaste.

No olvides que la intoxicación de alcohol es más que un terrible chuchaqui y debe ser atendido con urgencia. Si sientes: confusión, estupor, vómito, convulsiones, respiración lenta e irregular, temperatura corporal baja, o tienes la piel azulada busca un doctor o llama de urgencia al 911.