Los mejores alimentos para dormir mejor

Lo que comemos afecta a la forma en la que dormimos. Por ello, es aconsejable elegir los alimentos más adecuados para conseguir un buen sueño reparador y evitar aquellos que dificultan lograrlo. Para hacerlo, revisa esta lista que te traemos a continuación. Estamos seguros de que, si sigues estas indicaciones, tus noches serán mucho más reconfortantes.

Recurre a alimentos ricos en triptófano

Beber leche caliente es una de las recomendaciones más habituales para que nos vayamos a dormir mejor. ¿Sabes por qué? Porque los lácteos contienen triptófano, que es una sustancia que estimula el sueño. Pueden encontrarlo en otros sitios como las nueces, los plátanos, la miel y los huevos.

Date un antojo de carbohidratos (sin pasarse)

Los alimentos ricos en carbohidratos ayudan a estimular el triptófano en la sangre. Así que tu cena puede incluir un tazón de cereal y leche, nueces y galletas saladas, o pan y queso.

Come un refrigerio antes de acostarte

Si sufres de insomino, tener un poco de comida en tu estómago puede ayudarte a dormir. Pero ojo, que no sea mucha, porque una comida pesada pondrá a prueba tu sistema digestivo, haciéndote sentir incómodo e incapaz de conciliar el sueño.

Limita los alimentos ricos en grasa

Las investigaciones realizadas revelan que las personas que comen estos alimentos con frecuencia aumentan de peso y sus ciclos de sueño tienden a interrumpirse. Esto es debido a lo mismo que acabamos de decir: una comida pesada activa la digestión y, además, puede conducir a levantarse para ir al baño por la noche.

Cuidado con la cafeína escondida

No te sorprenderás si te decimos que una taza de café por la noche puede darte problemas a la hora de dormir. De hecho, hasta las más moderadas dosis de cafeína pueden provocar trastornos del sueño. Pero no hay que olvidar que la cafeína se encuentra en otros sitios que son menos obvios, como el chocolate, la cola y el té. Hasta el café descafeinado tiene un poco de ella, pero no lo suficiente como para que sea un problema. Para evitar problemas, no consumas cafeína entre 4 y 6 horas antes de acostarte.

Los medicamentos pueden contener cafeína

Otra fuente inadvertida de cafeína pueden ser las medicinas. Entre aquellos que pueden contenerla, ya sean de venta libre como los que necesitan de receta, están los analgésicos, las pastillas para bajar de peso, los diuréticos y los medicamentos para el resfriado. Estos y otros pueden llegar a tener tanta o más cafeína que una taza de café. Así que revisa bien el prospecto o la etiqueta del medicamento para comprobar si interfiere con el sueño o puede causar insomnio.

Evita el traguito de antes de dormir

Si bien el alcohol puede ayudar a conciliar el sueño con más rapidez, también es posible que no duermas bien, que te despiertes con frecuencia, que te desveles e incluso que tengas dolores de cabeza, sudores nocturnos y pesadillas. Si aun así quieres tomarte esa copa, toma un vaso de agua por cada bebida alcohólica para diluir los efectos del alcohol. Pero, para una buena noche de sueño, es mejor evitar el alcohol de 4 a 6 horas antes de acostarse.

Ten cuidado con los alimentos pesados y picantes

Ya lo hemos dicho: acostarte con el vientre lleno puede hacer que te sientas incómodo, ya que el sistema digestivo se desacelera cuando dormimos. También puede provocar acidez estomacal, al igual que la cocina picante. Si te vas a permitir una comida pesada, comértela por lo menos 4 horas antes de acostarse hará menos posible que tengas problemas al dormir.

Minimiza las proteínas a la hora de acostarse

Las proteínas son excelentes durante el día, pero no tanto a la hora de irse a la cama. Son más difíciles de digerir y contienen el aminoácido tirosina, que promueve la actividad cerebral. Así que, en su lugar, opta por un pedazo pequeño de queso y algunos carbohidratos amigables con el sueño, como las galletas saladas.

Corta los líquidos a las 8 p.m.

Mantenerte hidratado durante todo el día es bueno para tu cuerpo, pero pisa el freno antes de acostarte. Más que nada, porque no querrás tener que seguir levantándote para ir al baño después estar metido en la cama, ¿verdad?

No fumes para relajarte

Sí, bueno, no es un alimento. Pero vale la pena incluirlo aquí ya que, si es una de tus formas favoritas de relajarte, fumar no es una buena idea, ni de día ni de noche. La nicotina es un estimulante, con efectos similares a los de la cafeína. Evita fumar antes de acostarte o si te despiertas en medio de la noche. Sigue intentando dejarlo… es difícil, pero vale la pena.