El cáncer de mama es el segundo tipo de cáncer más común entre las mujeres, representa alrededor de un 11% de todos los casos. Estas cifras son las que han motivado cientos de campañas de prevención y de detección temprana, y en general ha tenido buenos resultados. El cáncer de mama ya no es lo que era hace 20 años, de hecho las tasas de supervivencia siguen aumentando gracias a la mayor conciencia y a los avances médicos en el tratamiento.
Sin embargo, algunos cambios de hábitos te podrían ayudar a prevenir esta enfermedad. Aquí te compartimos 5 formas de reducir el riesgo de cáncer de mama y cómo ponerlas en práctica.
Manténte activa
El ejercicio regular y la actividad física moderada ha sido vinculada con la prevención de varios tipos de cáncer. Encuentra un deporte que te guste o empieza a caminar con más frecuencia para gozar de los beneficios completos. Un adulto necesita alrededor de 2 horas y media semanales de actividad moderada, es decir 30 minutos diarios de lunes a viernes son suficientes para cuidar tu salud.
Limita tu consumo de alcohol
Una copa de vino diaria tiene algunos beneficios y nutrientes que son buenos para ti, pero más de esto puede traer algunos efectos secundarios. El Centro para Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos considera que mientras mayor sea el consumo de alcohol, mayor es el riesgo de sufrir de cáncer de seno. Así que mejor mantenerse con la copa diaria y el festejo ocasional.
A comer como los griegos
El sobrepeso y la obesidad también tienen una estrecha relación con mayor riesgo de cáncer de mama. Una manera práctica y deliciosa de cuidar tu peso es a través de una dieta mediterránea, es decir reducir el consumo de carnes rojas, azúcar y carbohidratos y aumentar las porciones de vegetales y grasas no saturadas.
Deja el tabaco
Esto ayudará a prevenir toda clase de enfermedades. El cáncer de pulmón es el más común entre hombres y mujeres a nivel mundial. Y en el caso del cáncer de mama, hace más vulnerables a las mujeres premenopáusicas a padecer de esta enfermedad.
La lactancia podría ayudar
Así lo aseguran algunos estudios. Dar de lactar a tu bebé es una decisión personal que la debes tomar tú con asesoría médica, pero un posible beneficio para ti es el menor riesgo tener cáncer de mama.
Estos cambios te ayudarán a tener una vida más sana y prevenir muchas otras enfermedades. Es importante no descuidar las mamografías y revisiones médicas constantes, además de aprender a reconocer bultos irregulares en tus senos. Recuerda que el cáncer de mama no afecta únicamente a las mujeres y por lo tanto cualquier persona con tejido mamario podría tenerlo. También es importante que si tienes historial familiar de cáncer de seno seas más atento a los posibles cambios, pues si bien puede afectar a todas las personas, aquellas con historia son más propensas.
