¿Estás enamorado? ¿Se te ha ocurrido que quizás estás enamorado del amor en lugar de una persona? O que incluso ¿podrías ser adicto al amor? Si en lugar de comer, dormir y trabajar normalmente solo piensas en tu siguiente relación, puede que sí se trate de una adicción.
Aunque muchos no lo creen, el romance intenso se puede asemejar mucho a una adicción: genera euforia, ansia, dependencia y si se lo termina incluso abstinencia y recaída. Los escáneres cerebrales demuestran que puede estar vinculado a la actividad de la adicción a las drogas en los centros de recompensa del cerebro.
De todos modos, el considerarlo adicción todavía genera muchas dudas. Pues pone en cuestión qué es realmente una adicción y sobre todo qué es realmente al amor.
Después de analizar 64 estudios de amor y adicción, publicados entre 1956 y 2016, un equipo de investigadores en Oxford University Center for Neuroethics sugiere que existen dos tipos diferentes de adicciones al amor.
El primero, lo encontraron en las personas que se sienten muy solas cuando terminan una relación y tratan de reemplazar a su pareja de manera inmediata. El equipo lo considera como adicción pues es una lucha interna por ignorar los fuertes deseos de estar cerca del objeto de sus afectos. Ellos quieren pasar todo su tiempo con ellos, y desarrollar pensamientos y comportamiento obsesivo. Estos casos podrían terminar en acecho o asesinato.
El segundo, es un poco más amplio e involucra a todos quienes caen en el espectro normal del amor pero con antojos más fuertes y potentes. Se basa en un comportamiento similar a la adicción a una droga: euforia con cada encuentro, pero dolor y depresión cuando tienen un final abrupto. Algunos de los investigadores no lo consideran como adicción pues a su parecer se tratan de etapas que una persona puede atravesar cuando termina una relación.
Otros expertos en el tema no reconocen los resultados de la investigación y se niegan a clasificar al amor en dos categorías. O a decir que una etapa de dolor es necesariamente una adicción, pues para la mayoría de gente la angustia desaparece con el tiempo o bien con terapia.
Si consideras que has sufrido de una fuerte separación o que podrías ser adicto al amor, el primer paso es buscar ayuda para lograr llevar una vida sana.
