La tos se produce cuando existe algo que molesta dentro de la garganta, puede ser desde polvo hasta goteo postnasal. También ayuda a limpiar los pulmones y las vías aéreas. En muchos de los casos, como en la gripe y el resfriado, la tos se irá por sí sola. Si es producto de una condición médica más seria, hay que tratar la causa con la ayuda de un doctor.
Para la tos ocasionada por razones comunes, existen algunos tratamientos caseros que se pueden probar para aliviar el malestar. Tomar suficientes líquidos y usar un humidificador ayudan a disminuir la irritación de la garganta. Tomar una cucharada de miel también puede ser muy efectivo. Hay estudios que demuestran que comer algo dulce puede ayudar a aliviar la tos. Sin embargo, no se debe dar miel a niños menores de un año.
Para la tos con flema, los doctores normalmente recetan medicamentos expectorantes. Este tipo de medicina ayuda a despegar la flema para poder ser expulsada. Aunque existen opciones de venta libre, siempre es necesario consultar a un doctor, en caso de que la tos sea severa o existan otras condiciones médicas. Si la persona sufre de enfisema, neumonía, bronquitis crónica o asma es necesaria un consulta médica. Los niños menores de cuatro años no deben tomar ningún tipo de medicina para la tos o la gripe.
Por otro lado, la tos seca se produce normalmente por una gripe, un resfriado, o si se ha inhalado algo irritante como polvo o humo. Para tratar esto, los doctores recetan un tipo de medicina que se conoce como ‘supresiva’, que ayuda a calmar el impulso de toser. Además, ayuda a dormir mejor. Las gotas para la tos, o incluso un caramelo, pueden aliviar ese cosquilleo que se siente en la parte trasera de la garganta. Los niños menores de cuatro años no pueden tomar gotas para tos.
La medicina para la tos no puede ser dada niños menores de cuatro años porque puede tener graves efectos colaterales. También es necesario consultar al médico antes de darle este tipo de medicamentos a niños entre cuatro y seis años. Después de esta edad, es más seguro utilizar estos medicamentos. Para los niños mayores de un año, se puede tratar la tos con una cucharada y media de miel para ayudarles a expulsar la flema.
La mayoría de casos de tos son infecciones virales, por lo que los antibióticos no ayudarán. SIn embargo, si después de una semana la tos no ha mejorado, es necesario ir al doctor para descartar que sea una infección causada por bacterias, como una infección sinusal o neumonía. De ser este el caso, el médico prescribirá antibióticos para tratar la tos.
Las alergias también pueden causar estornudos y tos. Los medicamentos antiestamínico puede ser la solución. Incluso existen nuevas versiones que no producen sueño. Sin embargo, si la tos viene acompañada de un silbido al respirar, puede que la persona sufra de asma. Es necesario ir al médico para descartar este diagnóstico.
