En estos días es difícil no sentirse abrumado de vez en cuando. Entre el trabajo, la familia y otros compromisos, puede estar demasiado estresado y ocupado. Pero siempre hay que dejar tiempo para relajarse, de lo contrario, esto provoca sufrimiento físico y psicológico. Aprender a manejar el estrés requiere práctica, pero se puede y se debe hacerlo.

Una alternativa es empezar a ejercitarse. Hacer ejercicio regularmente es una de las mejores maneras de relajar el cuerpo y la mente. Además, el ejercicio mejorará el estado de ánimo. Pero hay que hacerlo regularmente para realmente notar los efectos.

Se recomienda realizar ejercicio al menos de 3 a 5 veces a la semana, durante 30 minutos
Lo óptimo sería 2 horas y 30 minutos de ejercicio moderadamente intenso, como caminatas enérgicas. Hay que concentrarse en establecer metas de aptitud física que pueda cumplir para no darse por vencido. Sobre todo, hay que recordar que hacer cualquier ejercicio es mejor que no hacerlo.

Al sentirse estresado, los músculos se ponen tensos y es importante relajarlos. Se lo puede realizar, primero, con una extensión de los músculos. También se puede realizar un masaje, tomando un baño o una ducha caliente, y durmiendo bien por la noche.

Otra sugerencia es tomarse un momento del día para detenerse y realizar algunas respiraciones profundas, esto puede aliviar la presión de inmediato. Se recomienda realizarlo en 5 pasos. Primero, hay que sentarse en una posición cómoda con las manos sobre el regazo y los pies en el piso, también puede recostarse. Con los ojos cerrados, se debe imaginar que está en un lugar relajante. Lentamente se inhala y se exhala profundamente. Se recomienda hacer esto de 5 a 10 minutos a la vez.

Comer una dieta regular y bien balanceada ayuda a sentirse mejor en general. También puede ayudar a controlar el estado de ánimo. Las comidas deben estar llenas de vegetales, frutas, granos integrales y proteínas magras para obtener energía. No saltarse ninguna comida del día es igual de importante.

Otro consejo es tomarse un descanso. Se debe planificar algún tiempo de inactividad real para que la mente tenga más tiempo libre del estrés. Las cosas relajantes que se pueden hacer incluyen la meditación, el yoga, el tai chi, la oración, escuchando música, y pasar tiempo en la naturaleza.

Tener pasatiempos también es saludable. Se debe reservar tiempo para las cosas que disfruta. Hay que intentar hacer algo todos los días que le haga sentir bien y le ayudará a aliviar el estrés. No tiene que ser durante mucho tiempo, incluso 15 a 20 minutos servirán.

Desahogarse, hablar de los problemas es una solución muy buena. Hablar sobre las cosas que molestan puede ayudar a reducir el estrés. Se puede hablar con familiares, amigos, un clérigo de confianza, con un médico o un terapeuta.

Y también se puede hablar con uno mismo. Se llama diálogo interno y todos lo hacemos. Pero para que el diálogo interno ayude a reducir el estrés, hay que asegurarse de que sea positivo y no negativo.