El cáncer es una enfermedad que toma por sorpresa a cualquiera que lo padece, y lidiar con la idea de lo que representa un diagnóstico de este tipo, altera la vida tanto del paciente como de su entorno.
La mayoría de personas intentan ser empáticos con la situación, aunque muchas de las veces pueden herir o hacer comentarios que no ayudan en el proceso. Aquí algunos consejos de personas que han vivido esta experiencia.
1. Primero, aprende a escuchar
Siempre es un shock saber que un amigo o ser querido tiene cáncer de mama. Es natural querer saber todos los detalles, pero muchas preguntas pueden hacer la situación más dura de lo que ya es. Puede que la persona no tenga todas las respuestas, por lo que aceptar solo lo que ella quiera compartir es suficiente. Ella sabe que no sabes qué decir. Entonces, en lugar de decir cosas como “eres una luchadora, lo vas a vencer”, trata un “no puedo imaginar lo que debes sentir, aquí estoy para escucharte, si quieres hablar”.
2. No digas “llámame si me necesitas”
Es probable que nunca te llame. Es mejor ser específico con respecto a cómo puedes ayudar, por ejemplo puedes decir “puedo ayudarte con los quehaceres domésticos el martes o jueves” o “voy a preparar comida, hay algún ingrediente que no te guste”. Si la persona se está recuperando de una cirugía, puedes ofrecerte a lavarle el cabello.
3. Los niños necesitan atención
Los niños siguen siéndolo así su mamá esté atravesando por un cáncer o no. Ofrécete a llevar a los niños a su escuela o a sus actividades extracurriculares. Ayuda a que las cosas sean lo más “normal” posible. Muchas personas no saben qué decirles a los hijos de un padre o madre enfermo, entonces es mejor no decir nada. Dales tu apoyo y hazles saber que pueden recurrir a ti.
4. Necesita compañía
Es fácil que una persona con cáncer de mama se sienta abrumada por las decisiones que debe tomar. Puede necesitar ayuda para digerir toda la situación, ofrécete a acompañarla a las citas médicas, toma notas y haz preguntas. Tener un par extra de oídos puede aliviar la ansiedad. Puede que necesite compañía para las sesiones de quimioterapia o radioterapia.
5. La reconstrucción mamaria no es una cirugía plástica de aumento
Una mastectomía, remoción de una o las dos mamas, es todo una odisea. Muchas mujeres se sientes destrozadas ante el hecho de perder partes tan íntimas de su cuerpo. Aunque la reconstrucción puede reparar la forma y apariencia del pecho, no es lo mismo que una cirugía de aumento. Puede tomar múltiples cirugías y algunas mujeres deciden no hacerlo. Cualquier decisión que tu ser querido tome al respecto, respétala.
6. El cáncer no distingue edades
Si una persona en sus 20’s o 30’s tienen la enfermedad, seguramente está cansada de que la gente le diga “eres tan joven y activa, ¿cómo puede ser que tengas cáncer?. Esto puede hacerla sentir aislada, por lo que si se siente cómoda, acudir con un grupo de personas jóvenes en su misma situación podría ayudarle a enfrentar mejor la enfermedad.
7. También puede afectar a hombres
Más de 2.500 hombres al año son diagnosticados de cáncer de mama en los EEUU. Si es que es un hombre el afectado, no hagas preguntas como “¿por qué tienes una enfermedad de mujeres? o insistir que se trata de un diagnóstico errado. Los hombres con cáncer de mama incluso necesitan más apoyo, ya que se sienten fuera de lugar. Y lo más importante, si conoces algún hombre con una masa en el pecho insiste en la importancia de una revisión médica.
8. Ahórrale el sermón de la prevención
Mantén tus opiniones con respecto a la prevención del cáncer para ti mismo. No es de ayuda el sugerir que el yoga, los jugos, o cualquier otra creencia hubiera prevenido la aparición del cáncer de mama.
9. El cáncer no es igual para todos
Hay diferentes tipo de cáncer de mama. Algunos crecen rápido, otros lento, algunos son más difíciles de tratar que otros. Seguramente no tengas conocimiento exacto del tipo de cáncer que padece tu amiga, por lo que no digas cosas como “una amiga tuvo cáncer de mama y fue horrible” o lo contrario “el cáncer de mi tía no fue tanto problema”. Cada caso es único y las personas responden diferente al tratamiento.
10. Respeta un “No”
Una persona en tratamiento contra el cáncer de mama, o en recuperación de una cirugía tiene una cantidad limitada de energía. Algunas veces no querrán asistir a eventos o cancelar planes. Seguramente no es con mala intención, pero respeta su decisión en todo momento.
11. Las personas necesitan un descanso del cáncer
Si tu amiga accede a verte o a salir, seguramente de lo que menos quiere hablar es de su enfermedad. Al final, una persona es más que su enfermedad. Trata de enfocar la conversación en las cosas rutinarias, los hijos, vacaciones, intereses en común. Si ella quiere hablar de cáncer, que sea ella quien lo mencione.
12. El tratamiento es un camino largo
Muchas personas con cáncer de mama deben tomar medicación por periodos de 5 a 10 años para evitar recaídas. Estos medicamentos pueden tener efectos secundarios molestos como dolor articular, cambios de ánimo y fatiga. Por lo general también toman antidepresivos y medicamentos para el dolor. Recuerda que tu ser querido puede no volver a ser “la misma de antes” por un tiempo.
13. Seguir adelante puede ser difícil
El tratamiento termina y el cáncer está en remisión. Son excelentes noticias, pero algunas personas pueden tener aún un proceso mental que sanar también. Tu ser querido puede mostrar datos de estrés post traumático, como no dormir o tener crisis de llanto. Puede estar en constante búsqueda de nuevos signos de la enfermedad. En lugar de decirle que vuelva a la normalidad, aconséjale a seguir una terapia que ayude a enfrentar el problema.
14. Los pequeños detalles significan mucho
Las personas con cáncer de mama si requieren y valoran tus pensamientos y oraciones, aunque no hayan estado en contacto. Hazle saber a tu amiga que estás pendiente con una nota, un carta o incluso un mensaje de vez en cuando, solo para preguntar como está, puede mejorar su día. Puede que no responda, pero ten presente que todos los detalles cuentan.
