Todos hemos escuchado alguna vez sobre cómo reducir las porciones de comida que ingerimos termina por encoger el estómago con el tiempo. Si suena un poco loco, es porque según los expertos lo es.

En realidad el estómago tiene propiedades similares a las de una de un elástico que lo permiten cambiar de tamaño. Tiene capacidad de agrandarse cuando comemos un almuerzo grande y pesado, pero es perfectamente capaz de regresar a su tamaño original a las pocas horas. Esto no quiere decir que se vaya a encoger más que su tamaño original que es más o menos el mismo que un puño.

De hecho, ninguna dieta ni ejercicio lograrán encoger tu estómago más allá de su tamaño real. Hacer ejercicio cardiovascular y abdominal, además de llevar una dieta reducida en grasa y azúcar pueden tonificar tu abdomen pueden marcar tu abdomen. Pero si tienes sobrantes significantes de piel, o quieres reducir tu estómago, solo puedes hacerlo por medio de cirugías. Y en ese caso, debe ser con la recomendación de un médico.

Si todavía no nos crees, considera esto: el cuerpo humano está diseñado para absorber suficientes calorías para mantenerlo funcionando incluso en períodos de escasez de alimentos, algo que resultó muy útil en los tiempos de caverna. Y hoy en día, cuando reducimos nuestra ingesta calórica, la mayoría de personas tendemos a sentir más hambre. Esta es la respuesta natural de nuestro cuerpo que siente que se muere de hambre e inicia una serie de respuestas hormonales y fisiológicas para guardar la energía valiosa y al mismo tiempo motivarnos a comer. Por eso se inunda de la hormona que causa el hambre.

De modo que si lo que buscas es bajar de peso, te recomendamos que en lugar de cuidar calorías cuides nutrientes y que reduzcas las porciones gradualmente para no generar ansiedad a tu cuerpo. Así podrás bajar de peso de una manera lenta y sostenible, en lugar de cortar calorías de un día al otro y generar el famoso efecto rebote.

Otros datos curiosos

  • La comida tarda entre 2 y 3 segundos en llegar a tu estómago desde que la tragas, esto gracias al esófago que conecta a tu garganta con estómago en solo un par de segundos por bocado.
  • La causa más común de intoxicación alimentaria de el norovirus. 1 de cada 6 estadounidenses sufren de esta infección una vez al año, también conocida como gripe estomacal. Los síntomas incluyen dolor, náusea, diarrea y vómitos. Las bacterias dañinas, como E. coli, salmonella y listeria, también son fuentes comunes de intoxicación alimentaria.
  • Beber café puede acelerar tu metabolismo. El café tiene un compuesto que hace que los intestinos descarguen su contenido antes de lo normal, además de aumentar las hormonas digestivas presentes en este órgano.