Cómo reconocer una apendicitis

El apéndice es un órgano pequeño con forma de tubo, más o menos del mismo tamaño de un dedo, que se encuentra en el punto de unión de los intestinos delgado y grueso; y está ubicado en la parte inferior derecha de tu vientre. Hasta la fecha, los doctores no saben a ciencia cierta cuál es el rol que el apéndice desempeña, pero ya se ha desmentido que no tiene ningún propósito. Hoy en día, algunos investigadores sugieren que este órgano ayuda a almacenar a las bacterias buenas y eventualmente podría ayudar (de alguna manera que todavía no saben determinar) al sistema inmunológico.

Lo que más famoso le hace a este órgano es cuando se inflama e hincha, creando así una emergencia médica. La apendicitis sucede, por lo general, después de una infección en el intestino, un bloqueo, un cuerpo extraño o incluso cáncer. En realidad, la razón no siempre está clara. El primer síntoma suele ser un fuerte dolor cerca del ombligo o la parte superior del abdomen que empeora y se expande. Muchas veces viene acompañado de pérdida de apetito, náusea, vómito, hinchazón abdominal, fiebre e incapacidad para pasar gas.

Se pueden presentar otros síntomas como dolor y dificultad al orinar, cólicos severos, estreñimiento o bien diarrea. Es muy importante saber que si se siente estos síntomas, es necesario buscar ayuda médica de forma inmediata. Llama al 911 y no comas o bebas ningún tipo de alimento o remedio para el dolor pues podrían ocasionar la ruptura del apéndice inflamado.

Si no es tratado a tiempo, el apéndice va a perforarse o explotar lo que ocasiona un derrame de materiales infecciosos en la cavidad abdominal. En este caso estamos hablando de peritonitis, una infección grave que puede ser mortal y debe ser tratada con emergencia y antibióticos fuertes.

Cuando es tratada a tiempo, tu doctor extirpará tu apéndice y recibirás un tratamiento de antibióticos también. Normalmente, después de 12 horas ya podrás caminar y moverte con normalidad. Tomará entre dos a tres semanas máximo para que puedas recuperar tu vida y ritmo normal, al ser una incisión pequeña la recuperación suele ser rápida. La buena noticia es que no notarás la diferencia de no tener apéndice, estarás bien.

El grupo con mayor vulnerabilidad a sufrir de apendicitis son las personas entre 10 y 30 años. Si bien puedes tenerlo a cualquier edad, pasa con mayor frecuencia entre adolescentes y personas en sus 20 años. Lamentablemente, no existe una manera de prevenir la apendicitis, aunque algunos estudios sugieren que sucede con menor frecuencia en las personas que consumen mucha fibra pero podría ser una simple coincidencia. Lo que sí sabemos es que muchas veces las infecciones de parásitos o los fuertes golpes en el abdomen podrían desatarlo.

Recuerda que si reconoces estos síntomas, debes llamar con urgencia al médico.