Los huevos son un alimento que genera controversia sobre qué tan saludables son realmente, y se debe en parte al colesterol que contienen. Muchas personas sienten que deben escoger entre un alimento alto en proteínas y colesterol en la sangre. Pero no te apresures, porque hay mucho más que saber.

Son un alimento alto en nutrientes. Su clara es alta en proteínas y contiene nueve aminoácidos que los humanos no somos capaces de producir. Aporta vitamina A, vitamina B12, riboflavina (B2) y el selenio antioxidante, así como luteína y zeaxantina, que ayudan a mantener nuestros ojos sanos. Es incluso una de las pocas fuentes alimenticias con vitamina D. No es sorpresa que sea el alimento favorito de tantos deportistas.

Lo curioso es que la mayoría de vitaminas y minerales se encuentran en la yema, al igual que las calorías y el colesterol. Es importante notar que son bajos en grasas saturadas, que son las principales culpables de altos niveles de colesterol en la sangre. Por lo que realmente no hay mucho de qué preocuparse si se trata de un consumo moderado.

De hecho, un análisis reciente de varios estudios notó que el consumo de hasta un huevo diario no tiene relación con mayores riesgos de enfermedades coronarias o de accidentes cerebrovasculares. Incluso para las personas que tienen predisposición genética de experimentar efectos más fuertes de colesterol en la sangre.

El secreto está en cómo los preparamos, no es lo mismo desayunar un huevo tibio o un omelette de espinacas, que un huevo frito o una tortilla con queso y tocino. Así que sientete tranquilo para disfrutar de los huevos, solo pon atención a cómo los comes. Y equilibrar los huevos con otros alimentos saludables ricos en fibra, como frutas, verduras y granos enteros.

Otro buen consejo es evitar las dietas extremas o sensacionalistas (como las que prohíben por completo los huevos) y buscar un nutricionista si necesitas ayuda en las elecciones del día a día.