Podríamos estar en el mayor riesgo en la historia de experimentar brotes a gran escala y pandemias globales, como la gripe porcina, el Ébola y el Zika, así lo aseguran los expertos en Salud Pública.

La epidemia de Ébola entre el 2014 y el 2016 afectó a más de 28.000 personas y dejó más de 11.000 muertes. Mientras que el Zika ya se encuentra presente en al menos 84 países. Cada nueva infección es inesperada y tiene un alcance sin precedentes, dejando a toda la población muy vulnerable. El estilo de vida que llevamos hoy en día, es lo que nos hace tan frágiles.

El aumento de la población aumenta los riesgos

El mundo está cada vez más lleno de gente. Y este aumento de población hace que corramos más riesgo de propagar epidemias mortales entre nosotros. Además, hoy en día más personas viven en zonas urbanas densamente pobladas. De hecho, el número de megaciudades casi se ha triplicado (creció de 10 en 1990 a 28 en 2014).

La invasión de nuevos ambientes

El crecimiento de personas ha llevado a la necesaria expansión de territorios anteriormente deshabitados. Así, las personas nos ponemos en contacto con nuevos animales e inevitablemente, con nuevas infecciones.

El cambio climático

Algunos estudios evidencian que el cambio climático aporta a las olas de calor y a las inundaciones, por lo tanto a la creación de un ambiente perfecto para las enfermedades transmitidas por agua (como el cólera) además de los mosquitos que llevan enfermedades infecciosas.

El crecimiento de los viajes internacionales

Las llegadas de turistas internacionales rompieron un récord de casi 1.200 millones en 2015. Los agentes infecciosos viajan en los humanos y muchísimas veces dentro del periodo de transmisión (incluso si no parecen enfermos).

Menos médicos y enfermeros en las regiones del brote

Paradójico pero cierto. Los países en los que es más probable que se produzcan brotes, también son los que tienen menos personal de salud para tratar a la población. Más de 75 países tienen menos de un médico por cada 1.000 habitantes. Ecuador no es uno de éstos.

Todos estos factores se reúnen y pueden conducir a un brote. Los expertos aseguran que es necesario prevenir y prepararse para lo que podría venir, no sólo aprender a responder frente emergencias.

Fuente: Seven reasons we’re at more risk than ever of a global pandemic